lunes, 29 de noviembre de 2010

El Panteón de Roma

En el año 126 de nuestra era el emperador Adriano volvió a Roma tras cinco años de inspección de la frontera romana, concretamente de Britania. Mientras estuvo fuera sus constructores habían trabajado para cumplir los sueños arquitectónicos de este emperador enamorado de este arte.

Adriano quería dejar su huella en Roma para las generaciones venideras, quería que su legado arquitectónico fuera tan memorable como el de Octavio Augusto, se propuso reconstruir un templo incendiado que databa de la época de Augusto. Sobre los escombros de esas ruinas encargó construir el Panteón. Un templo majestuoso en honor a los dioses romanos.



El Panteón es para muchos la mejor estructura construida por los romanos, especialmente por su rotonda. La rotonda es un enorme espacio interior coronado por una espléndida cúpula. En su mismo centro la cúpula de hormigón se eleva a 45 metros de altura y se extiende a la misma longitud de lado a lado sin ningún tipo de columnas ni contrafuertes. La cúpula del Panteón sería durante dieciocho siglos la estructura de hormigón sin sujección más amplia del mundo.

Antes de poder cubrir de hormigón el techo los ingenieros de Adriano tuvieron que calcular como desviar el peso de su centro. De lo contrario las tres mil toneladas de hormigón al quitar las fijacciones de madera se desmoronaría por su propio peso. Actualmente es la construcciones de hormigón se introduccen unos cables de acero de tensión que soportan la mitad de la carga del hormigón, pero los romanos no podían hacer eso y la cúpula del Panteón hacía una presión constante externa hacia su base.

Los ingenieros del Panteón desarrollaron varias soluciones extremas para asegurarse que el techo no se viniese abajo. En primer lugar construyeron unos muros sólidos, de seis metros de grosor que sirvieran de buena base para el techo. Después según ascendía el techo hacia su cima mezclaron materiales más ligeros con el cemento, echando cada vez capas más ligeras. En la cima de la cúpula introdujeron jarros huecos dentro del hormigón para desplazar parte del hormigón y aligerar así la carga. Para que el techo fuera aún más ligero, moldearon unos paneles en forma de nicho llamados artesones que servían para un fin estético y para reducir la cantidad de hormigón necesaria para crear la cúpula.

Einblick Panorama Pantheon Rom.jpg


Otra modificación realizada para reducir el peso se convertiría la característica más distintiva del Panteón: El Oculus, un agujero de nueve metros de diámetro en el centro del techo. El oculus libera a la cúpula de tener que soportar la presion del hormigón en su punto más débil, además ilumina el interior.

File:Oculus of the Pantheon.jpg

Solo hay un error en el diseño del Panteón que desconcierta aún hoy en día. El pórtico frontal del Panteón con la columnata de acceso al interior es aproximadamente tres metros más corto y no conecta con la rotonda en el punto donde debería. Se utilizaron columnas de 12 metros en vez las necesarias de 15 metros, las especulaciones nos dicen que puede ser porque no consiguieron esas columnas a tiempo de que Adriano inagurara el edificio o quizás en el transporte se hundieron en el mediterráneo. Son simplemente conjeturas.

Archivo:Pantheon inside.jpg

Otro gran misterio es el de ¿quién fue su diseñador? No hay ningún documento que revele el nombre del arquitecto, aunque se especula que pudo ser el propio emperador. Otro posible candidato es Apolodoro de Damasco,  el responsable del foro de Trajano. Apolodoro desconfiaba de los conocimientos arquitectónicos de Adriano y lo declaró públicamente. Apolodoro le dijo una vez a Adriano "Vete a diseñar tus cúpulas calabazas". Adriano llegó a un punto que le molestaban tanto las críticas de Apolodoro que le ordenó suicidarse. En el año 138, ocho años después de ordenar la muerte de Apolodoro, Adriano murió, dejándonos esta maravillosa obra.


Fuente: La construcción de un imperio: Roma

Foto 1: Balawat
Foto 2-3-4  Creative Commons

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog

Etiquetas